HOMENAJE SAMOA de Ernesto Baca, 20 años después
A 20 años de su primera exhibición pública en la competencia internacional del Bafici, el Festival Internacional Infinito Super 8 se complace en celebrar el vigésimo aniversario de aquel estreno con la proyección –en su versión original de Super 8 milímetros- del largometraje Samoa, el film del argentino Ernesto Baca que inspiró a un sinnúmero de realizadoras y realizadores que encontraron en el formato de paso reducido un instrumento de múltiples posibilidades experimentales y expresivas.
Un verdadero hito en la historia local del cine de largometraje realizado en Super 8 milímetros.

Samoa, de Ernesto Baca. (2005, 70 minutos, Super 8 ampliado a 35 milímetros).
Protagonizada por Gadea Quintana, Laura Amor, Graciana Urbani, María Isabel Chiapetti, Ricardo Holcer.
Samoa en polinesio significa "centro sagrado". La película documenta un trance. No propone situaciones concretas, personajes ni diálogos. No cuenta una historia en el sentido tradicional ni impone al espectador una interpretación más o menos determinada de su sentido. Samoa tiene su origen en una serie de instantáneas de la realidad capturadas a lo largo de un recorrido por distintos rincones de la Argentina. Sobre ese registro de lo inmediato, el director intervino de forma artesanal dibujando y pintando a mano formas abstractas sobre el positivo, sumergiéndose en tinturas, quemándolo con ácidos e imprimiendo en él por contacto directo los objetos más diversos. La organización poética de las imágenes, sus texturas únicas, combinadas con la sugestiva música devocional hindú hacen de Samoa una experiencia hipnótica, espiritual, de una originalidad absolutamente inusual en nuestro cine.
"El largometraje experimental Samoa fue fundamental para renovar el interés por el Super 8 en Argentina a comienzos de este siglo. Su enorme colección de planos se organiza en torno a una idea única pero multivalente: el espejo como lugar de la contraconquista. La película abre y cierra con tomas de conquistadores llevando un espejo que refleja la luz, símbolo de las 'imágenes en guerra', es decir, de la perspectiva renacentista contra la que la película alista con frecuencia lo plano del formato Super 8. La propia estructura no lineal de Samoa adopta la figura del espejo: una curva simétrica en forma de palíndromo. Su concepción del espacio se desprende de la separación entre esos lados de la curva, lo que la convierte en lo opuesto a las concepciones espaciales dominantes en el cine 'clásico': toda una región de estructura y planos sin profundidad de campo frente a estructura delgada y espacio profundo. La película se convierte entonces en una constante interrogación de la noción de centro: el centro como pliegue entre dos representaciones espejadas, lo que a su vez se convierte en una oportunidad para interrogar la relación entre los centros metafísicos y los geopolíticos (metrópolis). La película apunta así hacia una ética de la liberación que no es accesoria sino que podría decirse que es interna al cine experimental de Súper 8". (Byron Davies, En la otra isla. Revista de Audiovisual Latinoamericano)

Samoa, por Ernesto Baca.
Universos en polvo flotan en el aire:
constelaciones no registradas
VHS enmohecidos
pulsos electromagnéticos.
Cuatro cabezas sucias
partiendo de un mismo cuerpo.
Humanos que mutan
a hormigas metálicas
A medida que me vuelvo pequeño
el asfalto se vuelve más veloz
me desgasta como la goma trasera de un bondi
Rituales enceguecidos de dios.
En la plaza
hay un impredecible aire multicolor
que se estrella en el parabrisas de mi mente.
Figuras que disipan movimientos,
senos llenos de leche
La birome explota tinta en mi bolsillo
un tren parte a Samoa
sin boletos.
Acerca de Ernesto Baca

Ernesto Baca (1969, Argentina) es cineasta y docente. Trabajo en la Universidad de Palermo de Buenos Aires y la Escuela Superior de Cine de México. Inició su trayectoria en Bellas Artes y posteriormente orientó su desarrollo artístico hacia la fotografía, completando sus estudios en CIEVYC, donde se graduó como director de cine y video en 1997. Es autor de numerosos cortos y largometrajes entre los se destacan Cabeza de palo (2002), Samoa (2005), Música para astronautas (2008), El sirviente (2009), Vrindavana (2010), Jardines (2012), La misión del comandante Asthar Sheran (2012), Réquiem para un film olvidado (2017), Escenas de simulación de guerra (2019) e Israel (2021). Sus producciones se vieron en festivales internacionales como Locarno (Suiza), Bafici, L'Alternativa y Punto de Vista (España), Oberhausen (Alemania) y Dobra (Brasil). Su más reciente largometraje, Historia universal, fue estrenado en 2022, consolidando aún más su posición en la escena cinematográfica. En los últimos años incursionó en el cine expandido, demostrando su versatilidad y creatividad en distintas disciplinas cinematográficas.
@bacacine